La gimnasia rítmica es una disciplina que combina elementos de ballet, gimnasia, danza y el uso de diversos aparatos como la cuerda, el aro, la pelota, las mazas y la cinta.
En este deporte se realizan tanto competiciones como exhibiciones en las que la gimnasta se acompaña de música para mantener un ritmo en sus movimientos. Se pueden distinguir dos modalidades: la individual y la de conjuntos.
La gimnasia rítmica deportiva surge como deporte en la década de los
30, en la Unión República Socialistas Soviéticas. Este deporte, creado
originalmente de forma exclusiva para la mujer, tiene sus antecedentes
históricos en los movimientos y sistemas gimnásticos que con diversos
sistemas surgen en el siglo XVIII en toda Europa Occidental.
La gimnasia rítmica moderna se desarrolló a finales de la década de
1950. En el año 1963, fue organizado en Budapest el primer Torneo
Internacional de Gimnasia Rítmica. Un año más tarde este Torneo
Internacional de Budapest fue oficialmente declarado como el primer Campeonato Mundial de Gimnasia Rítmica. La primera campeona mundial de gimnasia rítmica fue Ludmila Savinkova, de la Unión Soviética. En el año 1975 fue formada la Comisión Técnica de la Gimnasia Rítmica. En 1983 se instituyó la Copa del Mundo de Gimnasia Rítmica.
En 1984 pasa a ser disciplina olímpica en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles, donde ganó la canadiense Lori Fung,
convirtiéndose en la primera campeona olímpica de la historia de la
gimnasia rítmica deportiva en la modalidad individual. La modalidad de
conjuntos fue admitida en los Juegos Olímpicos de Atlanta en 1996, siendo el primer puesto para España.
Desde esta primera aparición, su acogida por el público en el programa
olímpico queda patente en el hecho que las entradas para presenciar sus
concursos han sido siempre de las primeras en agotarse.
En estos momentos, Bulgaria, Italia, Bielorrusia y Rusia
ocupan los primeros puestos de la clasificación mundial. Hoy en día la
gimnasia rítmica es uno de los deportes más practicados entre las niñas y
adolescentes. La Federación Internacional de Gimnasia
sólo reconoce la modalidad femenina. En Asia la categoría masculina se
empezó a popularizar a partir de los años 70, culminando en la
celebración del primer mundial de gimnasia rítmica masculina en 2003. En occidente, algunas federaciones como la española han aprobado también dicha modalidad.