GEMELAS AVERINA

Nacieron el 13 de agosto de 1998 en Zavolzhiye, la ciudad que besa la costa este del río Volga, el más grande del continente europeo, que nace entre la imperial Moscú y la histórica San Petesburgo.

Dina y Arina Averina son gemelas y, además de tener la misma carga genética, comparten una profunda pasión por la ritmica.

Desde pequeñas, ambas comenzaron a demostrar sus grandes cualidades físicas y lograron formar parte del conjunto de talentos que Rusia tiene en su seleccionado de promesas. 

Verlas es extraño. Cualquiera podría ser facilmente engañado y creer que sólo existe una de ellas. Es que, además de ser idénticas en lo genético, se fundan en una misma técnica, en un mismo estilo.

Los bebés que provienen de la división de un mismo óvulo fecundado suelen tener características psicológicas singulares y estar unidos por un intenso lazo emocional.  

Especialistas en genética aseguran que el estilo de vida, la alimentación, hacen que, con el tiempo, cada gemelo desarrolle su propia personalidad y se diferencie también en el aspecto físico. Por esto, la psicología  recomienda que lo ideal es tomar rumbos diferentes, tanto en el ámbito escolar,  como en el círculo de amigos y en el deporte.

Pero la pasión por la gimnasia fue más fuerte. Dina y Arina decidieron emprender el mismo camino y, como no podía ser de otra manera, trepan al mismo ritmo la cima hacia la excelencia.

El nivel de sus dificultades es muy similar al que lograba en sus épocas de junior Evgeniya Kanaeva, la actual campeona olímpica, mundial y europea.
Hoy, con 12 años, las gemelas ya están en la mira de la seleccionadora Irina Viner y se perfilan como las próximas lideres del equipo oficial de la Federació Rusa. 

¡Pero cuidado!, porque como ellas, hay decenas de "talentitos" que se entrenan con el afán de tener, algún día, un lugar entre las grandes. 

Más allá de todo, es inevitable imaginarse a las Averina conformando el duo individual que represente a Rusia en los Juegos Olímpicos de Río 2016.

Oksana Kostina 
 campeona mundial de gimansia ritmica


BONITO CADÁVER

Una gimnasta rítmica rusa que fue una de las mejores del mundo a principios de los años noventa, ganando catorce medallas en campeonatos mundiales y europeos. Obtuvo su mayor éxito en los mundiales de 1992 celebrados en Bruselas, donde conquistó cinco medallas de oro.

A pesar de todo no fue seleccionada para competir en los Juegos Olímpicos de Barcelona, donde habría sido una de las favoritas.

SABIAS QUE...

Nació el 15 de abril de 1972 en Irkutsk, ciudad rusa de la lejana Siberia. Su entrenadora Olga Buyanova pronto vió el pontencial de la niña, a la que entrenó duro para que llegara a ser una gran gimnasta, como finalmente sucedió.Con 17 años participó en los Campeonatos del mundo de Sarajevo '89, donde consiguió la medalla de oro por equipos con la Unión Soviética y la medalla de plata en la final de pelota, compartida con las búlgaras Dunavska y Panova y por detrás de la soviética Timoshenko.
En 1990 continuó su progresión, destacando en competiciones como el Gymnastic Masters de Stuttgart, donde fue segunda en la general tras Oksana Skaldina y venció en tres aparatos. También brilló en los Goodwill Games de Seattle, donde fue tercera en la general.
 Participó en los campeonatos europeos de Göteborg '90 y en los mundiales de Atenas '91, ganando la mefalla de oro por equipos para la URSS. El mayor problema para Kostina era estar a la sombra de sus compañeras de equipo Alexandra Timoshenko y Oksana Skaldina, ambas ucranianas y grandes dominadoras a nivel mundial. Como en las finales de los grandes campeonatos sólo se permitía la presencia de dos gimnastas por país, casi siempre era Kostina la que se quedaba fuera.
Su suerte pareció cambiar en 1992. En los europeos de Stuttgart consiguió la medalla de bronce en la general individual, por detrás de la búlgara Petrova y de Timoshenko, y por delante de Skaldina. Además fue la triunfadora en las finales por aparatos, ganando el oro en mazas, pelota y aro.

 


El 11 de febrero de 1993 sufrió un accidente de tráfico en las afueras de Moscú, cuando viajaba acompañada de su novio Eduard Zenovka, ganador de dos medallas en pentatlón moderno en los Juegos de Barcelona '92. Zenovka conducía el vehículo cuando perdió el control del mismo estrellándose contra un camión. Los analisis posteriores demostraron que conducía bajo los efectos del alcohol.

Ambos fueron trasladados urgentemente a un hospital, donde Kostina falleció a las pocas horas por las heridas sufridas. Zenovka también sufrió graves daños, pero conseguiría recuperarse e incluso regresar a la práctica deportiva, conquistando una medalla de plata en los Juegos de Atlanta '96.

Oksana en su ultimo mundial